viernes. 29.03.2024

La llegada del cine a Murcia

La industria Cinematográfica es quizás la dimensión menos estudiada de nuestro país. Y dentro de este campo encontramos tres aspectos fundamentales: Producción, distribución y exhibición. En Murcia, la evolución de las salas de teatro y la creación de salas de cine forman parte de la  historia de la exhibición cinematográfica en España.  

 

Hace 124 años, en diciembre de 1895, un grupo de apenas 30 personas se reunía en los sótanos del Grand Café de París, asistiendo así a la que es considerada la primera proyección de cine con público de la mano de los hermanos Lumière. En España, esta primera demostración del invento de los Lumière se produciría al año siguiente, en un salón de los bajos del Hotel Rusia de Madrid. Es el francés Alexandre Promio, enviado por los hermanos Lumière, quien da a conocer en España el cinematógrafo.

Cuando comenzaron las primeras proyecciones en España, la gente hacia cola ante el edificio de la Carrera de San Jerónimo. El precio de la entrada era de una peseta, un precio considerablemente elevado para la época, ya que cualquier espectáculo teatral solía costar la mitad. Al tercer día de empezar las proyecciones, el evento consiguió una fama que llevo a asistir a la propia familia real, y es la propia Regente María Cristina quien se acerca a felicitar al operador de los hermanos Lumière.

Los primeros españoles que rodaron películas fueron Eduardo Moreno o Joseph Sellier alrededor de 1897. A este último se Segundo-de-Chomóndebe la película desaparecida El Entierro del General Sánchez Bregua. Joseph Sellier era un cliente habitual de los Hermanos Lumière, y fue ese año cuándo les compró un cinematógrafo y organizó la primera exhibición en La Coruña el 23 de mayo. La primera película española con argumento fue Riña en un café (1897), del fotógrafo y director Fructuós Gelabert nacido en Barcelona. El primer director español de éxito internacional fue Segundo de Chomón, un pionero en el mundo del cine que entendió que este servía para algo más que para contar la realidad. En este reportaje de La Sexta podemos conocer un poco más su figura:  Entre sus grandes aportaciones al mundo cinematográfico se encuentra el sistema de coloreado artificial cinemacoloris y gran variedad de innovaciones en efectos especiales, como el uso de maquetas que podemos ver en Choque de Trenes (1902) o de las sobreimpresiones en Pulgarcito (1903). Tanto Gelabert como Chomón son considerados los primeros maestros y pioneros del cine español.


 

El cine en Murcia


Como en Madrid o Barcelona, en Murcia no había salas de cine como tales, sino salones reconvertidos para poder ofrecer tanto obras de teatro como proyecciones cinematográficas. La primera sala de cine de la capital murciana fue el Salón Express, inaugurada en febrero de 1898, pero tenemos que esperar a finales del siglo XIX para que en la región apareciesen las primeras salas de cine. Estas salas no podrían haber existido sin los hermanos García, precursores de la cinematografía y de las proyecciones por diferentes puntos de España y sobre todo de la Región. Los hermanos García, cuya actividad resurgió en 1900, tenían varios salones en funcionamiento, y asistían a ferias de toda la Región para realizar sus exhibiciones. Es en 1907 cuando inauguran el primer cine estable de la región, situado en Cartagena en la calle Honda, diseñado por el arquitecto Tomás Rico, autor también del prestigioso Teatro Circo de Cartagena. Este cine se mantuvo en funcionamiento hasta finales de los años 20, cuando debido a la crisis económica del 29, se retiran del negocio.

En la década de los años veinte es cuando asistimos al nacimiento de las salas más populares de la capital. En 1923, nace el cine Media Luna (en el barrio del Carmen), en 1926 se inaugura el cine Popular (en el barrio de San Juan) y en 1928 el Salón Sport Vidal (en el barrio de San Andrés). A estos tres nuevos cines hay que añadir en la capital otras dos salas que ofrecían cine con asiduidad: el Teatro Circo Villar (el local más importante) y el Teatro Ortiz, inaugurado en 1914, que funcionaba como un local polivalente de espectáculos que sólo eventualmente ofrecía películas y que a partir de 1926 convertiría la exhibición cinematográfica en su actividad fundamental. Se pasaría a llamar el Central Cinema en 1929 tras una remodelación y que en 1946 pasa a convertirse en el Cine Rex que perdura hasta nuestros días. 

En esta época, la industria del cine se monopolizó debido a la compra por parte de la empresa Iniesta S.C.R de la mayoría de los cines de la capital y también de los demás sitios de la Región. Solo el Salón Sport Vidal seguía siendo independiente.

Teatro Circo Murcia

Teatro Circo Villar/ teatrocircomurcia.net

La mencionada anteriormente Sociedad Iniesta, era una empresa dedicada a la exhibición cinematográfica que aupó el sector de las salas de cine en la Región de Murcia y en algunas localidades cercanas  como Albacete, Almería o  Alicante. Los primeros años de esta sociedad coinciden con el fin del cine mudo, por lo que van de la mano con la transición que se dio a la hora de hacer y ver cine; en los años 20, con el cine mudo, era habitual que en las salas de hablase y comentase la película, algo que cambió una vez llegó el cine con sonido.

Esta sociedad, que comenzó su actividad en 1926 pero no se oficializó su creación hasta un año más tarde, creó un programa en el cual utilizarían el Teatro Circo como sala para estrenar y presentar las grandes producciones y estrenos, dejando para el Cine Popular, en ese instante su única competencia, los preestrenos de películas menores o el reestreno de películas exitosas que ya habían pasado por el Teatro Circo. No duró mucho la competencia, pues en 1928 el Cine Popular fue alquilado por la Empresa Iniesta. Poco a poco esta sociedad fue adquiriendo todas las salas de cine de la capital Murciana a excepción de la Sala Sport Vidal, como ya dijimos anteriormente. Sin embargo, en la Guerra Civil, esta sala se unió al circuito de los Iniesta al no poder aguantar en época de guerra la competencia de las demás salas. Esta información se ve ampliada y completada en el libro Empresa y exhibición cinematográfica de Murcia (1985-1939) de Pascual Vera Nicolás, de donde se ha conseguido la información relacionada con la Sociedad Iniesta. 

 

Películas proyectadas


Desde los años 20 las salas de cine de Murcia proyectaban éxitos internacionales y clásicos españoles, tales como El Gabinete del Doctor Cagliari (1920), El misterio de la Puerta del Sol (1929) y Un perro Andaluz (1929).

un perro analuz

Un perro andaluz/ Pinterest

En los años 30 debido a la guerra civil, muchas películas no pudieron terminar el rodaje, y las que sí pudieron tuvieron que irse a otros países, como Alemania o Francia. En esta década encontramos éxitos españoles como Carmen la de Triana (1938) e internacionales como la mítica King Kong (1933).

Carmen-la-de-Triana

Carmen la de Triana/ FNAC

 

En los 40 y 50, debido a la censura, las películas pasaban un estricto control y a algunas de ellas se les realizaban cortes para eliminar aquello que no se quería que fuera visto. Uno de los mejores y más conocidos directores españoles, Luis Buñuel, tuvo que emigrar a Estados Unidos por la censura. En esta década encontramos un gran clásico del cine español como es Los últimos de Filipinas (1945). En estos años el cien patriótico y el religioso era el que llenaba las salas de cine. Alba de América (1951) y Marcelino Pan y Vino (1955) son ejemplos de ambos estilos. Pero el verdadero protagonista del cine español por aquel entonces era Berlanga, que realizó la famosa cinta Bienvenido Míster Marshall (1953).

los ultimos de filipinas

Los últimos de Filipinas/ Filmaffinity

 

Y en los 60, con la censura flexibilizándose, el cine vive grandes estrenos traídos de la mano del ya de vuelta Luis Buñuel, como Virdiana (1961), y también se proyectan clásicos mundiales como Espartaco (1961), Lawrence de Arabia (1963) o El bueno, el feo y el malo (1966).

lawrence de arabia

Lawrence de Arabia/ allposters.es

Crisis de los cines


Casi 30 años de esplendor de este sector, superando periodos difíciles como la Guerra Civil, y la evolución hacia el cine sonoro, que sufriría un duro golpe con la aparición del medio que sigue dominando el sector de la comunicación y del entretenimiento, la televisión, que aparece a finales de los 50 y se consolida en los 60. El aumento del nivel de vida de los españoles por esta época, ya pasada la peor parte de la postguerra, hizo que muchas familias se permitieran el lujo de tener un televisor en su casa, siendo esta competencia demasiado poderosa para los cines. Puestas así las cosas, el Salón Vidal cerró sus puertas en 1966 y un año más tarde lo hizo el Cine Popular, dos de los coliseos más antiguos de la capital. Tal situación no hizo sino agravarse en la década de los setenta, tocando fondo en la siguiente, cuando se popularizó el vídeo doméstico. Aunque hay que destacar, en la década de los años ochenta, el nacimiento del Cine Centrofama (1983) y el de Floridablanca (1982).

La crisis que empezó a castigar a España en los 90, fue el último y duro golpe que recibieron las salas de cine de la región, pues se pasó de 133 cines que proyectaban en 1980 a 60 en 1990, pasando el número de espectadores de 4.726.576 a 2.174.000.

Desde inicios del año 2000, solo el cine Salzillo, convertido en la Filmoteca Regional de Murcia, y el Cine Rex han seguido teniendo actividad y siendo independientes de las empresas que poseen varias salas de cine en la capital.

¿Estamos ante el final de las salas de cine independientes?