En España hay casi las 500.000 personas que han sido diagnosticadas como celíacas, pero, ¿quiénes son el colectivo que se definen como sensibles al gluten? Debido a que es un problema detectado desde hace muy poco en la sociedad, no hay apenas investigación ni información sobre esta vertiente de la intolerancia al gluten.
Aurora Montoya, enfermera auxiliar, a través de su experiencia personal, nos narra cómo le afectó esta intolerancia al gluten a su salud, cuando fue diagnosticada y cómo dejar de consumir estos alimentos provocó una considerable mejora en casi todos los ámbitos de su vida.
Dices que eres intolerante al gluten, ¿que diferencia hay con la enfermedad celíaca?
La celiaquía tiene un diagnóstico eficaz y su respuesta al gluten es inmediata. Es decir, cuando una persona sufre una crisis celíaca, se empezará a encontrar muy mal de repente y los consecuencia en las salud son más radicales.Normalmente se suele detectar de niño, aunque cada vez, aumentan los casos en adultos.
En cambio, una persona sensible al gluten, como yo, es mucho más difícil de diagnosticar, ya que no hay unos niveles en sangre que los médicos puedan identificar de forma clara. Por lo que, hasta tus pruebas a la celiaquía pueden salir negativas. Además, la enfermedad se va manifestando con más lentitud, porque los síntomas no son tan agresivos. Por esta razón, puedes estar comiendo gluten mucho tiempo y sentirte mal y no ser consciente de ello. De todas maneras, hay muy poca investigación científica sobre la sensibilidad al gluten.
Actualmente, todos estamos tomando el doble de gluten de lo que deberíamos.
¿Cómo se te diste cuenta que eras intolerante al gluten?
LLevaba muchos años que me encontraba mal; estaba siempre hinchada, me sentía cansada, no dormía bien y sobre todo, tenía un problema grave en la piel. Había ido al médico y a algún nutricionista, y todos me decían que los síntomas eran los de una persona celiaca, pero los resultados de mis pruebas eran negativos.
Por este motivo, yo seguía comiendo gluten. Además, la mayor parte de los alimentos que te ofrecen en las tiendas, supermercados o bares contienen esta proteína, y para qué engañarnos, los alimentos suelen estar más esponjosos y tener mejor sabor, así que, seguía consumiéndolos.
De todas maneras, como mi problema de piel cada vez se agravaba más con el tiempo, yo seguía acudiendo a diferentes médicos. Un día, una dermatóloga me propuso que estuviera cuatro meses sin comer gluten y como ya no sabía a quién acudir para que mis síntomas pudieran mejorar, y no tenía nada que perder, le hice caso y mi vida mejoró notablemente.
Cuando cambió su alimentación, ¿cómo mejoró su calidad de vida?
Mi calidad de vida, mejoró un 80%. En esos cuatro meses, los problemas de piel disminuyeron, me empecé a sentir menos hinchada… notaba como mi mente estaba más clara y hasta me sentía menos cansada. Por lo que, tomé la decisión de no tomar nunca más gluten.
De todas maneras, como una persona sensible al gluten lleva mucho tiempo consumiendo estos alimentos hasta que se da cuenta de su problema, poco a poco se va perjudicando el intestino, provocando algunas afecciones.
Los productos sin gluten son muchos más caros que los normales. En principio es porque cuesta más elaborarlos y las harina son más caras.
Cuando come fuera, ¿le cuesta encontrar un restaurante o bar que tenga alimentos sin gluten?
Ahora no tanto. Cada vez hay más supermercados, panaderías y bares que están mentalizados con el tema y ofrecen más variedad de productos para este colectivo. Pero para personas que como yo, que somos intolerantes al gluten.
Las personas celiacas tienen mucho más problemas, porque esos restaurantes tendrán que tener otra cocina, otra freidora, otro hornillo… tiene que estar todo muy aislado, porque un celíaco no puede tomar nada que esté contaminado de gluten. El simple polvo de la harina le haría ponerse malo. En cambio, la gente como yo, no tenemos ese problema, da igual que estén cocinando donde ya se haya procesado un alimento con gluten porque la contaminación no nos afecta directamente.
¿Cómo te ha afectado económicamente la compra de alimentos sin esta proteína? ¿Has notado mucha diferencia?
Los productos son muchos más caros que los normales. En principio es porque cuesta más elaborarlos y las harina son más caras. Por ejemplo, la harina de maíz no lleva gluten, la harina de trigo, si. Yo suelo ir a un bar que utilizan la harina de maíz, y como soy amiga de la cocinera y conoce mi problema, me hace los rebozados con esa harina especialmente para mi. Una vez le pregunté si no era mejor utilizar esa harina para todos y me respondió que no, que era mucho más cara y hacerlas en grandes cantidades no era rentable para el negocio.
Han aumentado los casos de celiaquía e sensibilidad al gluten, ¿a qué cree que puede deberse?
Puede haber muchísimo motivos pero apenas hay información al respecto. Quizás puede ser una forma errónea de manipular el grano o el hecho de que la mayoría de los productos contienen gluten y probablemente, estemos tomando el doble de gluten de lo que deberíamos… yo solo sé, que nuestros padres que tomaban muchos más alimentos naturales y hechos por ellos, no tenían tantos problemas alimentarios como existen en la sociedad actual
Ahora “llevar una dieta sin gluten” parece estar de moda e incluso quienes no tienen la intolerancia se comportan como si la tuvieran ¿Qué opina al respecto?
Puede que haya gente que lo utilice como moda y que lo haga para adelgazar o sentirse menos hinchados después de las comidas, pero eso es solo un grupo reducido de personas desinformadas sobre el tema y que no es consciente que, aunque el alimento que consume no lleve gluten, si lleva otros aditivos maliciosos, es igual de perjudicial.
Pero en la mayoría de los casos, como es el mio, es por necesidad y porque, aunque no está científicamente comprobado y los nutricionistas, puedan creer que dejamos de tomar gluten solo por modas, hemos comprobado como una dieta sin gluten, ha mejorado nuestra vida en todos los sentidos.
