Los trabajadores son los principales implicados en esta nueva normativa que rige el teletrabajo. Ahora, tienen más claro cuáles son sus condiciones y sus derechos a la hora de trabajar desde casa: “Es más productivo, trabajas más centrado. Lo único que no me gusta es que no me relaciono con mis compañeros”, destaca Javier Rubio, administrador de sistemas en una consultora en Madrid.
Javier lleva siete meses trabajando a distancia, desde que se instauró el Estado de Alarma en todo el país. La pandemia ha hecho que empresas como la suya hayan tenido que adaptar la forma de trabajo de parte de la plantilla. “Pienso que el teletrabajo era necesario en algunos aspectos, mi puesto se puede realizar desde casa y antes no teletrabajaba”, comenta el joven.
Una de las normas que recoge el Real Decreto-Ley del trabajo a distancia es que la empresa se hará cargo de los gastos en cuanto a medios, equipos y herramientas. “El ordenador es de la empresa, cada uno tiene el suyo”, asegura Javier. En su caso, desde el inicio del teletrabajo, la empresa cubría el material, en este caso informático, que es necesario para trabajar.
Manuel Tejada es ingeniero informático en Jaén, donde trabaja para la empresa de seguros ‘Hello Auto’. Él también comenzó con el teletrabajo a partir de la pandemia. Desde el 10 de marzo lleva a cabo su jornada laboral desde casa, aunque acude a algunas reuniones de forma presencial. “Asumo que como mínimo seguiremos teletrabajando hasta febrero o marzo del 2021, aunque aún no hay fecha prevista para la reincorporación presencial”, asegura el informático.
El teletrabajo implica una mayor responsabilidad en cuanto a horarios y distribución del tiempo, algo que ya está regulado por la ley. En su caso, la empresa emplea dos métodos para controlar las horas de trabajo. “Además de fichar las horas vía web, tenemos una herramienta de monitorización en el portátil de la empresa donde se registran las horas trabajadas”, comenta el ingeniero.
Dentro de su jornada laboral, de 8h a 17h, tiene una hora de descanso para comer. El joven asegura que su horario es el mismo que cuando trabajaba de forma presencial y que ahora tiene flexibilidad horaria. “Tenemos bastante flexibilidad en el tema horario, es decir, si un día tengo que entrar más tarde no hay problema mientras lo recupere, ya sea en el mismo o en distinto día”, asegura Manuel.
Unas normas, que antes no quedaban muy claras, y que ahora velan por la seguridad y los derechos de todos los trabajadores gracias a la nueva ley del trabajo a distancia.
