jueves. 25.04.2024

Las entrañas de los esports

Sé que para muchos este es un terreno desconocido, por lo que el miedo se multiplica. Son muchos los padres que sufren por ver a sus hijos horas y horas dentro su habitación jugando al Fortnite. Sin embargo, no es todo malo, pero tampoco es oro todo lo que reluce

Lo primero que quiero dejar claro es que este es un sector que ahora mismo se halla en un constante crecimiento. No se encuentra en un estado prematuro, pero tampoco podemos dejar todo de lado para dedicarnos a ello (a no ser que seas muy bueno y te llegue una proposición difícil de aceptar).

Hace apenas 5 años este era un mundo poco profesional (siempre tomando como ejemplo el mundo occidental) Simplemente hace falta investigar un poco y conocer, de mano de muchos jugadores, que el salario que recibían apenas era de 100 euros por jugar en un equipo de League of Legends en España. Hago referencia al salario ya que este es un buen indicador de la profesionalización del sector.  

RafaL0LAsus_JoséIván_Deportes

También es cierto que el paso del tiempo ha hecho que este sector entre en un proceso muy bueno de maduración. El respaldo de las instituciones públicas, así como el de las privadas hace que cada vez sea menos arriesgado dedicar tu futuro al mundo de los deportes electrónicos.

El ecosistema de jugadores es muy sencillo: en la gran mayoría de videojuegos en los que se compite de manera profesional, la edad de entrada es realmente temprana, dándose casos en los que algún jugador ha empezado a competir con 16 años. Pero claro, esto luego tiene una gran repercusión en su carrera. Debido a las horas de práctica (llegan incluso a las 10 horas al día) y a la plena dedicación que se le tiene que dar a estas competiciones (ya que luchas por ser el mejor) hace que muchos de ellos acaben incluso “quemados” de su profesión con 23-25 años, lo que hace que esta sea su edad de retirada. 

Para muchos, todo este desgaste no es más que una gran recompensa a su duro trabajo. Jugadores como Lee “Faker” Sang-hyeok (quizá el jugador de videojuegos más conocido a nivel mundial) o el recientemente retirado de la vida profesional Jesse “JerAx”Vainikka ( jugador que, en 2019, ingreso 3,16 millones de dólares jugando a Dota 2) han logrado, gracias a su éxito deportivo, legiones de fans a lo largo del mundo, que en muchos casos, superan a jugadores de deportes tradicionales.

Sin embargo, ellos no están solos. Detrás de ellos nos topamos con instituciones cuyo apoyo es increíble.  Equipos como G2 Esports (equipo creado por el ex jugador Carlos “Ocelote” Rodriguez) o T1 ( equipo coreano considerado el más exitoso de la historia) han logrado tener una relevancia en los fans de una manera increíble, ya que en ambos casos, ya son consideramos más que un mero equipo de esports.

Como dato importante tenemos que, Team Vitality (equipo de esports francés) vende las mismas camisetas que un equipo de media tabla de la Ligue1, primera división del fútbol francés. Los esports están para quedarse.

FranciaCamisetas_JoséIván_Deportes

Pero claro, no todo es dinero y éxito. No todos los jugadores tienen este renombre, ya que el deporte no depara el mismo destino para todos. Muchos de ellos se plantan con 25 años y su carrera profesional se ha acabado. ¿Y ahora qué? Muchos optan por entrenar a equipos profesionales debido a su gran conocimiento tanto del sector como del juego hace que su experiencia sea algo muy valioso. Sin embargo, otros optan por desvincularse totalmente y retomar sus estudios o sus trabajos.

En definitiva, sé que para la gran mayoría de padres (familiares en general) es muy complicado aceptar este nuevo trabajo, ya que muchos no lo consideran como tal, pero realmente es importante tratar de apoyar en lo que podías a vuestros hijos, todo ello sin olvidar que es un mercado muy efímero y contar con cualificación superior es algo muy importante ya que es algo que en un futuro te va a permitir elegir a lo que te quieres dedicar.