Son varios los motivos que han llevado al club ha atravesar esta crisis, entre ellos el bajo rendimiento de alguno de sus jugadores como Antoine Griezmann o Messi, el nuevo modelo de juego, los resultados y la directiva
Desde aquel Barcelona- Bayern en Champions, donde los catalanes cayeron 2-8, el Barça no es el mismo. A partir de ese momento, el, club atraviesa una gran crisis en todos los ámbitos. Ese resultado solo fue el detonante para que la bomba estallara, detrás ha venido la salida de Luis Suarez al Atlético de Madrid, la no salida de Messi, el cambio de entrenador y ahora la dimisión de su presidente. Aquella humillación en Champions hizo que el club que se planteara muchos aspectos, entre ellos la sustitución de Setién por Koeman, un cambio de entrenador que lleva consigo un cambio también de juego, algo con lo que todavía los catalanes parecen no estar cómodos en el terreno de juego y se nota.
Messi anunció al club su deseo de no continuar y salir gratis, cosa que el club negó apoyado por Laliga, exigiendo el abono total de su cláusula, lo que abrió aún más la brecha. El argentino no se sentía ya cómodo ni estaba de acuerdo con las decisiones que estaba llevando a cabo la directiva. Un mes más tarde, y de una forma repentina, el club anunciaba la salida de Luis Suarez al atlético de Madrid, lo que hizo que saltaran las alarmas dentro del equipo, decisión que al igual que a la afición, a Messi también sorprendió mucho.
Tras dos años y medio al frente del equipo, Ernesto Valverde fue relevado por Quique Setién con la intención de que el club saliera adelante, sin embargo, fue todo lo contrario, tras varios partidos Seitén se encontró bajo el punto de mira de todos, hasta que el 19 de agosto el club anunció como nuevo entrenador a Ronald Koeman.
Son varios los motivos que han llevado al club ha atravesar esta crisis, entre ellos el bajo rendimiento de alguno de sus jugadores como Antoine Griezmann o Messi, el nuevo modelo de juego, los resultados y la directiva
Desde aquel Barcelona- Bayern en Champions, donde los catalanes cayeron 2-8, el Barça no es el mismo. A partir de ese momento, el, club atraviesa una gran crisis en todos los ámbitos. Ese resultado solo fue el detonante para que la bomba estallara, detrás ha venido la salida de Luis Suarez al Atlético de Madrid, la no salida de Messi, el cambio de entrenador y ahora la dimisión de su presidente. Aquella humillación en Champions hizo que el club que se planteara muchos aspectos, entre ellos la sustitución de Setién por Koeman, un cambio de entrenador que lleva consigo un cambio también de juego, algo con lo que todavía los catalanes parecen no estar cómodos en el terreno de juego y se nota.
Messi anunció al club su deseo de no continuar y salir gratis, cosa que el club negó apoyado por Laliga, exigiendo el abono total de su cláusula, lo que abrió aún más la brecha. El argentino no se sentía ya cómodo ni estaba de acuerdo con las decisiones que estaba llevando a cabo la directiva. Un mes más tarde, y de una forma repentina, el club anunciaba la salida de Luis Suarez al atlético de Madrid, lo que hizo que saltaran las alarmas dentro del equipo, decisión que al igual que a la afición, a Messi también sorprendió mucho.
Tras dos años y medio al frente del equipo, Ernesto Valverde fue relevado por Quique Setién con la intención de que el club saliera adelante, sin embargo, fue todo lo contrario, tras varios partidos Seitén se encontró bajo el punto de mira de todos, hasta que el 19 de agosto el club anunció como nuevo entrenador a Ronald Koeman.
No todos los problemas acabaron ahí, hace seis días, tanto Josep Maria Bartomeu como el resto de directivos anunciaban presentaban su dimisión
