En Berlín las noches de fiesta son largas y pueden incluso alargarse el día entero y llegar hasta la noche siguiente, las discotecas de electrónica y clubs que parecen clandestinos en Berlin se han convertido en un reclamo para miles de jóvenes que visitan la capital alemana en busca de disfrutar de uno de los mejores panoramas musicales de Europa.
Es muy importante tener algunos aspectos en cuenta puesto que debido a la alta afluencia de gente, los clubs toman medidas cada vez más estrictas en las puertas haciendo su acceso muchas veces imposible. En Alemania las leyes de aforo se cumplen de forma muy estricta, por lo que si 4.000 personas quieren entrar y el aforo es tan solo de 1.200, necesitan un criterio para denegar la entrada a 2.800 personas.
Por este motivo antes de salir a buscar una sala para bailar hasta que el cuerpo aguante es importante saber dónde se va a ir y en que clubs es posible entrar. Por ejemplo el código de vestimenta es bastante importante, en salas como Berghain en negro es un plus y en KaterBlau cuánto mas color mejor. Cada club tiene un público diferente, y eso se refleja en la ropa, incluso algunos clubs tiene código de vestimenta marcado, el cual deberías saber antes de intentar pasar sus puertas. No intentes arreglarte, cuanto menos lo hagas mejor, para entrar en esos mundos irreales es necesaria vestimenta irreal.
El momento es importante
Si quieres entrar en alguno de los clubs más exclusivos como Tresor o Berghain, si eres un turista de a pie mejor que no lo intentes durante el viernes o el sábado por la noche. Posiblemente te toque hacer el camino de la vergüenza después de estar horas en la cola esperando a temperaturas bajo cero. Mejor ve primero a un club que el acceso sea más fácil, como Watergate, puedes intentarlo el domingo. No habrá problema porque los clubs se mantienen abiertos hasta el lunes.
Fuente: Facebook/Cola para entrada Berhaim
Matén la compostura
Para lograr pasar las puertas de los mejores clubs del mundo es importante saber comportarse antes de entrar. No quieren turistas escandalosos ni borrachos, intenta mantener la compostura ante todo. Si te rodea un grupo escandaloso intenta que el portero no te relacione con ellos. Los alemanes tienen un carácter serio, adoptar la actitud de los berlineses será de gran ayuda. También te será bastante más fácil si no vas en un grupo muy gran de gente, dos o tres personas es lo ideal.
Fuente: reportaje fotográfico Guillem Sartorio/ Sven Marquardt, portero de la discoteca Berghain.
Conoce el cartel
Muchos porteros preguntan antes de dejar pasar si conocen quién va a pinchar esa noche. Es importante para ellos puesto que así el aspirante demuestra que esta allí de verdad porque va a disfrutar de la música y no solo por la fiesta. Prefieren un público entendido y así mantener una imagen selecta.
Cartel de Tresor Cartel de Berghain
En Berlín no se posturea
En la era digital y de las redes sociales tenemos la mala costumbre usar el móvil como una extensión más de nuestro cuerpo compartiendo en cada momento lo que hacemos con el resto del mundo. En Berlín esto no es una opción. Si ya estando en la cola te ven haciendo demasiadas fotos o muy pendiente a tu móvil, posiblemente no te dejen pasar. Si consigues pasar el filtro de la entrada, una vez dentro los porteros pondrán pegatinas en la cámara de tu smartphone o en algunos locales llegan hasta a requisar el móvil y dar a cambio un ticket con el que podrás tenerlo de vuelta al salir del local.
Si sigues vidente tentada una vez dentro a compartir con el mundo lo que pasa y hacer un video o unas fotos, mejor no lo hagas porque posiblemente si te ven te expulsarán del local. Lo que pasa en los clubs se queda en los clubs y quieren mantener la privacidad de todo lo que pasa dentro, creando una atmósfera de aislamiento con el exterior para poder disfrutar al máximo de la música y la experiencia.
No todo son grandes clubs
Fuente: Facebook/ Fachada del club Paloma
Si quieres probar la experiencia berlinesa de forma mas ligera, siempre puedes acudir a pequeños clubs donde la noche podrá ser igual de divertida pero mucho más amena. Por toda la ciudad hay bares “secretos” donde la música techno vuelve a ser protagonista y otra vez la clandestinidad y decadencia que muchas veces parece reinar en Berlín vuelve a hacer acto de presencia.
Uno de estos clubs es el Paloma, se encuentra en Skalitzer Strasse 135, 10999 Berlin. Tanto por fuera como los alrededores del bar parecen abandonados pero si consigues pasar te sentirás como si atravesaras el armario de Narnia. Para guardar la clandestinidad, el contraste del interior con el exterior es asombroso.
