viernes. 19.04.2024
PRUEBA PARA LA DETECCIÓN DEL VIH.
PRUEBA PARA LA DETECCIÓN DEL VIH.

¿Qué es el VIH?

El VIH, el Virus de Inmunodeficiencia Humana, es el virus que causa el SIDA.

El VIH es el virus que se transmite de persona a persona. Con el tiempo, el VIH destruye un tipo de células importante del sistema inmunitario (denominado células CD4 o células T) que nos protegen de las infecciones. Cuando no tienes suficientes células CD4, tu cuerpo no puede combatir las infecciones como lo haría normalmente. Sin estas células al organismo le cuesta mucho trabajo combatir las enfermedades, por lo que te conviertes en una persona propensa a enfermar gravemente por infecciones que en otras circunstancias no te dañarían.

Una vez contraído, el virus permanece en tu cuerpo de por vida. No existe cura para el VIH, pero hay medicamentos que ayudan a que te mantengas saludable durante más tiempo y que disminuyen las posibilidades de que contagies a otras personas.

 

¿Qué debo hacer si contraigo el VIH?

Por una parte, los estudios demuestran que tomar los tratamientos contra el VIH de acuerdo a las instrucciones, puede bajar la cantidad de VIH en tu sangre tanto que puede no aparecer en una prueba, cuando esto sucede, no transmitir el VIH por vía sexual.

Por otra parte, entre la segunda y la cuarta semana después de contraer la infección puedes sentir algo de fiebre, dolor y malestar. Los síntomas similares a los de una gripe común son la primera reacción del cuerpo. En ese momento, hay una gran concentración del virus en tu organismo, así que es fácil transmitirlo a otras personas. Después de algunas semanas, estos síntomas desaparecen durante unos años. 

¿Qué indicios da del Sida?

Las señales o síntomas del SIDA incluyen: aftas (un revestimiento espeso y blanco en la lengua o la boca), dolor de garganta, infecciones graves por hongos, enfermedad pélvica inflamatoria crónica, infecciones graves recurrentes, cansancio persistente, mareos y aturdimiento, dolores de cabeza, pérdida repentina de peso, formación de hematomas con más frecuencia de lo normal, diarrea, fiebre, o sudores nocturnos durante mucho tiempo, glándulas inflamadas o duras en la garganta, las axilas o la ingle, episodios de tos seca y profunda, sensación de falta de aire, protuberancias violáceas en la piel o en la boca, sangrado de la boca, la nariz, el ano o la vagina, erupciones de la piel y adormecimiento de las manos o los pies, pérdida del control sobre los músculos y los reflejos, incapacidad de movimiento y pérdida de fuerza muscular

Sin embargo, y generalmente, las personas que contraen la infección se sienten sanas durante algún tiempo. Pueden transcurrir 10 años, aproximadamente, hasta que la infección por VIH manifieste algún síntoma. Por ello, es tan importante realizarse pruebas del VIH periódicamente, especialmente, si has tenido sexo sin protección o compartido agujas.